Corazón Prestado

Cerraste los ojos y miré tus labios
atento, contemplé en ellos un ayer.

Encendí el prohibido pabilo del recuerdo
se dibujó el aroma de nuestro amor pasado,
del deseo que nos guardamos
y el 'te quiero' que callé.



Encontramos un rincón en esa luna que miramos
y ahora estamos callados;
ya en ella, tú y yo nos contemplamos en silencio.
Somos nosotros,
'es ella',
me lo dice el telescopio de mis manos.

Ambos anticipamos un beso.
Ninguno recorre el breve espacio entre labios.
Breve espacio que olvidaron estos cuerpos
que se funden ya en el iniciado encuentro que duramos evitando.

El amor de tu vida no está a tu lado,
el mío tampoco, pero somos tú y yo.
El amor irrealizable nos sorprende;
de pronto parece realizado.

Me pides a mí que pare este acercamiento
porque sabes que tú no quieres hacerlo.
Algo grande despertó el amanecer
y sabemos que es tarde;
ninguno de los dos ya puede detenerlo.

No sé si te beso o me besas,
no sé si te abrazo o me abrazas.
No sé lo que pasa.
Estamos agitados, es lucha desenfrenada.

Somos dos exploradores que encontraron un tesoro.
El mío está dentro de tu alma
y ahora busco con mi boca un punto de tu cuerpo
por donde pueda sacártela.

Nos detenemos, nos miramos
y solamente nos miramos,
sobra decir algo.

Tus pupilas encendidas me miran como se ve a un extraño.
Te preguntas en qué te has convertido y por qué te gusta tanto.

No hay tiempo para mirarnos,
es preciso devorarnos justo ahora,
no hay mañana.
Enloqueces de nuevo entre mis brazos.

Y así seguimos amaneciendo,
trazando prohibidos versos piel con piel,
alternando locura y contemplación
¿para no perder la cabeza?

Aunque sí perdimos la cabeza,
Recordando.
Olvidando.
Sin más ley que la pura evocación.
Sin más ley que la nuestra.

En aquél pequeño espacio
donde anoche cupo el mundo,
cupo el universo.
Un presente y un pasado.
No importó mucho el futuro.

Cupo todo el universo
y conocimos nuevos mundos encontrados.
Aunque algunos no los visitamos.
Es tan breve el tiempo...

Hasta la próxima vez, dulce aliento.
El próximo amanecer nos encontramos,
amiga de mis lamentos,
fruta prohibida,
corazón prestado.